¿Cuánto vale España?

Hace un par de años, en plena burbuja inmobiliaria, se me ocurrió calcular lo que valía el bloque de pisos donde yo vivía. Les pongo en situación; afueras de Madrid, barrio obrero, bloque de 40 años, colmena, de pisos de 60 metros. Hoy han bajado un poco los precios pero el cálculo tan divertido aun se puede hacer:

Un piso de mi barrio vale de media 150.000 euros. Somos 32 vecinos, pues 5.400.000 euros de nada. Eso sólo mi portal. El bloque tiene 8 portales, lo que nos da un total de 43 millones 200 mil eurazos. No está nada mal, Siete mil millones de pesetas. Así que mi puto bloque donde vive el huevero, la tía Jacinta y el tío Mendingo vale lo mismo que las acciones de un Club de Futbol de Primera División. No sé como no los vendemos todos y nos compramos uno. Nos íbamos a forrar.

En mi barrio, donde pace la tía Bernarda, el agüelo Sinforoso y el tío Elmóngenes, hay 20 bloques como el mío. Osea que mi barrio vale 860 millones de euros. Algo así como lo que cuesta el Real Madrid y el Barcelona juntos.

¿Quien podría comprar mi triste barrio? Nadie. No hay dinero suficiente. ¿que les parece? Mi barrio es tan caro que solo una enorme multinacional podría comprarlo. ¿No será que no vale eso? ¿No será que vale 10 veces menos? ¿que nos hemos vuelto todos locos? No me extrana que el 2005, el Banco de España gritara desesperado que no le salían las cuentas. Que el dinero prestado nunca se podría devolver.

Siguiendo este sencillo cálculo podemos decir que a una media de 150.000 euros, que me quedo corto, si hay 20 millones de pisos en España, que me quedo corto también, los pisos españoles cuestan la absurda cifra de 3 billones de euros. Con un interes del 2% anual a 30 años, 6 billones de euros. Teniendo en cuenta que el PIB de China son 4 billones, ni siquera la tercera economía del planeta podría comprar los cuchitriles de 50 metros y tabiques de papel de fumar que tenemos por viviendas. Una nación de 1000 millones de personas, gran potencia mundial, no podría pagar lo que valen nuestros pisillos. Que tampoco es tanto... Cuatrocientos noventa y ocho billones de pesetas.

Qué razón tenía la gente. Si es que 40 millones no es nada caro.



Ramiro Carvasio